El balance de situación refleja la situación patrimonial de una empresa, es decir, ofrece información económica y financiera de la misma. Está formado por el Activo, el Pasivo y el Patrimonio Neto.

Es un documento público y su elaboración es muy importante ya que nos ofrece una visión general del estado de una empresa. Además, debe de ser actualizado y presentado anualmente de forma obligatoria según lo dispuesto en el artículo 28.5 del Real Decreto Legislativo 5/2000. 

La empresa debe de elaborar el balance siguiendo en todo momento el Plan General Contable.

El balance de situación aporta una percepción fija de la situación empresarial. Puede ser muy útil realizar comparaciones entre balances de diferentes años y así, ver la evolución de la empresa. 

Gracias a este documento contable las empresas pueden llevar un orden de lo que les pertenece y lo que deben.

ESTRUCTURA DEL BALANCE

Es importante tener en cuenta las proporciones de cada partida del balance, ya que determinan datos fundamentales, entre otros, como:

  • Liquidez: permite conocer el efectivo disponible en la empresa para saber si puede hacer frente a sus pagos. Activo Corriente / Pasivo Corriente
  • Fondo de Maniobra (capital circulante): es la parte del activo corriente financiado con deuda a l/p. Se calcula como Activo Corriente – Pasivo Corriente, esto indica que la empresa no tiene problemas de liquidez a corto plazo. Un amplio fondo de maniobra te permite hacer frente a imprevistos en los cobros y pagos.
  • Solvencia: es la capacidad de la empresa para hacer frente al total de las obligaciones. Activo Total / Pasivo Total

El Balance de Situación se divide en:

ACTIVO

En él se incluyen todos los bienes y derechos que posee la empresa. La empresa espera obtener beneficios o rendimientos económicos en el futuro procedente de estos activos.

A su vez, está formado por el activo no corriente y el activo corriente.

Activo no corriente (l/p): Los activos no corrientes, por lo general, no son líquidos, por lo que tardarán más de un año en convertirse en efectivo. Está formado por:

  • Inmovilizado intangible (patentes, licencias, etc.).
  • Inmovilizado material (edificios, maquinaria, etc.).
  • Inversiones inmobiliarias (terrenos, construcciones, etc.).
  • Inversiones en empresas del grupo y asociadas a largo plazo (instrumentos de patrimonio, créditos a empresas, etc.) 
  • Inversiones financieras a l/p (inversiones permanentes).
  • Activos por impuesto diferido (Créditos acumulados no utilizados o asignados).

Activo corriente (c/p): Está formado por todos los bienes y derechos que se van a consumir, enajenar o hacerse líquidos en el ejercicio normal de la empresa (menos de un año). Los activos corrientes se caracterizan porque pueden convertirse fácilmente en efectivo. Se compone por:

  • Activos no corrientes mantenidos para la venta.
  • Existencias (materias primas, productos terminados, etc.).
  • Deudores comerciales y otras cuentas a cobrar (clientes por ventas, personal, etc.). 
  • Inversiones en empresas del grupo y asociadas a corto plazo (créditos a empresas, derivados, etc.).
  • Inversiones financieras a corto plazo (instrumentos de patrimonio, valores representativos de deuda, etc.). 
  • Periodificaciones a c/p.
  • Efectivo y otros activos líquidos equivalentes (tesorería).

Generalmente, se estructura en partidas de menos a más líquidas.

PASIVO

Refleja todas las deudas y obligaciones económicas que tiene la empresa. Las deudas permiten a la empresa financiarse para llevar a cabo su actividad. Asimismo, está compuesto por:

Pasivo no corriente: Está formado por las deudas con vencimiento a largo plazo. También se llama pasivo fijo. Las cuentas que lo forman son las siguientes:

  • Provisiones a largo plazo (obligaciones por prestaciones a largo plazo al personal, provisiones por reestructuración, etc.).
  • Deudas a largo plazo (deudas con entidades de crédito, acreedores por arrendamiento financiero, etc.).
  • Deudas con empresas del grupo y asociados a largo plazo.
  • Pasivos por impuesto diferido.
  • Periodificaciones a largo plazo.

Pasivo corriente: En él se incluyen las obligaciones y deudas con vencimiento inferior a un año. También llamado pasivo circulante. Está formado por las siguientes cuentas:

  • Deudas a c/p (deudas con entidades de crédito, Acreedores por arrendamiento financiero, etc.).
  • Provisiones a c/p.
  • Acreedores comerciales a c/p y otras cuentas a pagar a c/p (proveedores, personal, etc.).
  • Pasivos vinculados con activos no corrientes mantenidos para la venta.
  • Deudas con empresas del grupo y asociadas a corto plazo.
  • Periodificaciones a corto plazo.

PATRIMONIO NETO

PN = Activo – Pasivo

En esta partida del balance se encuentran las aportaciones de los propietarios y accionistas, más los resultados que no se han distribuido y las reservas del negocio. Además, representa la capacidad que tiene la empresa de autofinanciarse, es decir, los recursos financieros que pertenecen a la empresa.

Está formado por:

  • Fondos propios (capital social, prima de emisión, reservas, (acciones y participaciones en patrimonio propias), resultados de ejercicios anteriores, otras aportaciones de socios, resultado del ejercicio, (dividendo a cuenta), otros instrumentos de patrimonio neto). 
  • Ajustes por cambios de valor.
  • Subvenciones, donaciones y legados recibidos.

Por último, cuando realicemos el balance de situación de nuestra empresa, debemos tener en cuenta que: A = P + PN

El balance de situación, junto con la cuenta de pérdidas y ganancias, el estado de cambios en el patrimonio neto, el estado de flujos de efectivo y la memoria son los documentos que forman las cuentas anuales que hay que presentar de forma obligatoria anualmente en el registro mercantil.

Departamento de Marketing y Comunicación, Agosto, 2022.