El concurso de acreedores es una herramienta para aquellas empresas que presentan dificultades a la hora de hacer frente a sus obligaciones económicas. Su objetivo principal es evitar la quiebra del negocio, a la vez que se solventan las deudas con todas las partes implicadas. Esto sucede porque se negocia con ellos los plazos y formas de pago. Pueden realizarlo tanto personas físicas (autónomos) como jurídicas (PYMES y grandes empresas) mediante un procedimiento judicial.
¿Quiénes están involucrados en un concurso de acreedores?
- El administrador de la empresa.
- El juez responsable del concurso.
- El administrador concursal, nombrado por el juez, y que dirigirá la empresa mientras dure este proceso. Su misión será velar por los intereses de todas las partes implicadas. Normalmente es un abogado o un economista.
- Los acreedores, empleados y organismos públicos.
¿Qué tipos existen?
Podemos diferenciar dos formas de llegar al concurso de acreedores:
- Por solicitud voluntaria: el administrador de la empresa prevé un riesgo claro de falta de liquidez inmediata y presenta el concurso. A pesar de recibir este nombre, no hay mucha alternativa si se da una situación de impagos recurrentes. Presentarlo es una obligación legal y se da de plazo máximo tres meses para hacerlo.
- Por solicitud forzosa: sucede cuando lo solicita algún acreedor (por ejemplo, un proveedor) o algún socio de la empresa, no pudiendo hacerlo el administrador.
¿Cuáles son sus fases?
- En la fase común entra el administrador concursal, que comprueba qué es lo que tiene (por ejemplo, vehículos) y qué es lo que debe la empresa. Si es un concurso forzoso, no puede ser ciego. Esto significa que se publica en el BOE desde el inicio del proceso.
- En la propuesta de convenio se ofrece a los acreedores ordinarios la posibilidad de cobrar el 50% de sus créditos en un plazo máximo de 5 años. Se necesita para ello que al menos la mitad de ellos estén de acuerdo con esta resolución. Si esto no sucede, se procede a la liquidación.
- La fase de liquidación. Ocurre en el caso de no poder llegar a suficientes acuerdos de quita o un incremento en los plazos de pago.
- Por último, la calificación determina la resolución del concurso.
¿Quién cobra primero en un concurso de acreedores?
Un breve resumen del orden de los pagos es: primero se abonarían las cantidades pendientes a los trabajadores, Seguridad Social y Hacienda. Luego a los bancos. Siguen los proveedores y, en último lugar, los socios.
¿Cómo se puede evitar un concurso de acreedores?
Como hemos indicado antes, realmente existen pocas vías alternativas al concurso de acreedores. Si no hay liquidez, se acabará presentando en un corto plazo. Sin embargo, la empresa puede recibir una inyección monetaria gracias a servicios como el anticipo de facturas o el descuento de pagarés antes, después y durante el concurso. Este tipo de servicios suavizan el impacto de este proceso.